El verano está aquí, y con él llegan también las ganas de refrescarse con una buena cerveza artesanal fuera de la ciudad. Para nuestra suerte el pasado 26 de junio se llevó a cabo el lanzamiento de la cerveza “Xela”, una nueva propuesta cervecera que ya cuenta con dos estilos disponibles, y que en meses por venir estarán inaugurando su Tap Room a un costado de Rondo del Valle.
Forjada tras la integración de Eric O Connor (Thorn Brewing Co), Alberto Cruz (Rondo del Valle), Juan Carlos Miranda (agricultor con 15 años de experiencia vitivinícola) y Collin Corrigan (Cervecería Transpeninsular), esta marca cervecera nace con la intención de unir lazos entre cervecerías mexicanas y norteamericanas e impulsar la comunidad cervecera del Valle de Guadalupe.
“Siempre hemos buscado impulsar el mercado cervecero”, comparte Collin Corrigan, “y creemos que ahora es buen momento para hacerlo en Valle de Guadalupe, aportando a la comunidad de cerveceros que ya existe en esta zona con cervecerías como Chivo Gruñón, Media Perra, Misioneros y muchos otros. Queremos impulsar la calidad y la consistencia de esta comunidad y ofrecer un espacio donde disfrutar una refrescante cerveza como parte de la experiencia gastronómica del Valle”.
De acuerdo con Collin, el concepto e imagen de Xela nace también de una fusión de talentos, en este caso, de los artistas locales Omar Chavira y Roberto Gutiérrez, quienes inspirados en el Dios mexica de la agricultura Xipe Tótec, crearon un “Dios de la agricultura de la cerveza” de nombre Xela: “se nos ocurrió esto pensando en que a todo mundo le gusta la chela; es inspirados en esta mitología prehispánica que incorporamos elementos como los lúpulos, las espigas y la iconografía mexica para darle vida a Xela”, nos comenta Omar Chavira.
Durante el lanzamiento de Xela se “destaparon” dos primeras cervezas: Zaretti –una Italian Pilsner inspirada en las cervezas comerciales de este país, que busca homenajear a la comunidad italiana de Baja California–, y Xela IPA –una tradicional West Coast IPA elaborada con una variedad muy particular de lúpulos norteamericanos, mismos que la hacen muy aromática y con un perfil apegado a las IPAs de San Diego–.
Collin agrega que en un futuro producirán cervezas bajo un programa de “fermentación espontánea”, así como estilos poco convencionales para el grueso de la población, como sours y lambics. “Queremos experimentar además con levaduras salvajes, fermentando la cerveza en tanques de acero inoxidable que tomen la levadura salvaje que abunda en el aire del Valle”.
El cervecero californiano concluye que si bien la marca ya está en circulación, será hasta octubre cuando sea inaugurado su Tap Room, ocasión en la que pretenden hacer una gran fiesta para recibir, como en todo buen ritual, las bendiciones del Dios de la agricultura cervecera.